«Biofilia. You+Nature+Home. A handbook for bringing the natural world into your life», Sally Coulthard

Este mes ha sido publicado este libro sobre Biofilia, que nos permite acercarnos un poco más a esta tendencia tan de auge actualmente.
El término biofilia fue acuñado en los años 60 por el psicoanalista Erich Fronm, que la definió como el amor a la vida, la pasión por lo viviente. Desde entonces se ha desarrollado e incorporado en campos como la arquitectura, intentando acercar la naturaleza a lo edificado.
La tendencia a abandonar las áreas rurales y, consecuentemente, el aumento de la población en áreas urbanas, hacen replantearse la forma de vida que queremos tener.

Más del 50% de la población vive en áreas urbanas, llegando incluso a más del 80% en países como el Reino Unido, y la tendencia es al alza.
Actualmente, el ser humano está preparado para vivir y trabajar en ambientes creados de forma artificial. Nos hemos adaptado a una vida con luz artificial y vivimos como animales en cautiverio.
«We live in a world that is fundamentally mismatched to our evolutionary adaptation -we don’t see, hear and feel the things that we are programmed to respond to»
«Modern cities and buildings are essentially ‘zoos’, places that have been constructed as a replacement for our natural enviroment, so it’s no wonder that we often don’t feel at ease»
El cambio empieza a producirse con la creación de ambientes para vivir y trabajar que incorporen los elementos naturales que nos hacen sentir mejor, tales como luz natural, aire puro, plantas, elementos de agua y materiales poco procesados.
El simple hecho de instalar paneles de maderas podría conseguir un gran impacto, tanto por el cambio en la textura, como por la sensación de calma que la madera proporciona. Un estudio realizado por Holzscluster Steiermerk (Schule Ohne Stress -colegios sin estrés-) muestra que los alumnos en clases de madera están más relajados y duermen mejor que los de aulas convencionales.
Por su parte, la introducción de plantas en viviendas y lugares de trabajo es un forma fácil de cambiar los ambientes. Pero se trata de seres vivos que necesitan unas condiciones de mantenimiento adecuadas.
Es fundamental el aporte de luz natural para que realicen una adecuada fotosíntesis y mejoren la calidad del aire. Aunque pueden sobrevivir con poca luz, en estas circunstancias se relentiza su metabolismo y consecuentemente su propiedades depurativas.
Igualmente, no se trata de cantidad sino de calidad. Es preferible el empleo de menos plantas pero colocadas estratégicamente, ubicándolas cerca de ventanas o invirtiendo en la construcción de una pared vegetal donde pueden optimizarse las condiciones de luz y riego.
También es importante la elección de especies, atendiendo a las necesidades de luz (directa o indirecta), humedad y riego.
Estracto del artículo publicado en el Financial Times por Catriona Gray el 21 de marzo de 2020.
Otras publicaciones: «El efecto de la Biofilia» y «El poder curativo de la naturaleza» de Clement G. Arvay.