La época de plantación es marzo-abril, en suelo rico en materia orgánica y ligero. Aunque prefieren una ubicación soleada, si las vamos a plantar en un lugar con altas temperaturas, es mejor hacerlo en semisombra. Para mantener la humedad es aconsejable añadir algún tipo de mulch. Hay que tener cuidado con el viento ya que los tallos son muy frágiles.
El marco de plantación va a depender de la variedad, aunque por regla general se plantarán a 50cm de distancia y a una profundidad de 10-15cm. A las babosas les encantan los tallos jóvenes de las dalias: si quieres protegerlos puedes añadir tierra de diatomeas.
Cuando las dalias tienen tallos largos, lo ideal es poner tutores, uno por tallo, para evitar que se doblen cuando salgan las flores.
El riego debe ser moderado y siempre sobre la tierra (no hay que mojar ni hojas ni flores). Es preferible el riego en profundidad y distanciado.
Debe añadirse abono granulado en la plantación y abono líquido cada 2 semanas desde julio hasta septiembre, con alto contenido en potasio (como el abono para tomates) para incentivar la floración.
Cuando las flores se sequen, es aconsejable realizar pinzados, podando los tallos por encima de las yemas. El pinzamiento semanal ayuda a la floración continua. Si la planta tiene muchos tallos, habrá que aligerarla en junio-julio, reduciéndolos. Si se trata de dalias gigantes, dejar de 3 a 5 tallos por planta. Para el resto, dejar de 7 a 10 tallos por planta. Esto se hará podando por encima de un par de hojas a unos 40 cm.
Cuando bajan las temperaturas, se termina la temporada de las dalias. En este momento caben dos opciones:
1. Dejarlas en su sitio, cortando los tallos y cubriendo la tierra con mulch (compost o virutas) unos 10-15cm.
2. Sacar los tubérculos: cortar los tallos y desenterrar los tubérculos. Sacudir para que quede la menor tierra posible; retirar los bulbos dañados o muertos. Reducir los tallos hasta 5-15cm y almacenarlos en cajas poco profundas; tapar con material aislante (ej.: arena). Poner en lugar oscuro y fresco. Tapar con periódico.
La reproducción debe hacerse en primavera, cuando aparezcan los primeros tallos, por división, pero dejando siempre más de un bulbo por planta.